El Colegio Eclesiástico Internacional Sedes Sapientiae es un seminario erigido por la Santa Sede el 9 de enero de 1991, para la formación en Roma de candidatos al sacerdocio provenientes de diócesis del mundo entero. La dirección del colegio eclesiástico está confiada a la prelatura del Opus Dei.
El pasado 21 de octubre se celebró la apertura de curso en la nueva sede, situada en el barrio del Trastevere, en el antiguo Conservatorio de San Pascual, que permitirá dar cabida a un mayor número de seminaristas frente a los 65 actuales. La reconstrucción de la nueva y definitiva sede se ha podido llevar a cabo gracias al acuerdo estipulado con la Associazione CUIR y a la generosa ayuda de multitud de personas e instituciones, entre otras, el Centro Académico Romano Fundación.
Durante el acto, al que asistieron diversas autoridades, el consejero de políticas sociales del ayuntamiento de Roma, se felicitó por la posibilidad de que alumnos de los cinco continentes fueran potenciales difusores de la romanidad cristiana y de su cultura, por todos los rincones del mundo.
Como señalaba el rector del colegio, Pedro Huidobro, "los alumnos acuden a la ciudad eterna para aprender Roma -parafraseando a Juan Pablo II-; y Roma enseña a ser católico, universal, a tener un corazón grande capaz de comprender y amar a todos".
Los alumnos del presente curso académico proceden de Antillas Holandesas, Austria, Birmania, Brasil, Camerún, Ecuador, El Salvador, Eslovaquia, España, Estados Unidos, Filipinas, Gabón, Ghana, Guinea Ecuatorial, India, Kenia, Líbano, Liberia, Liechtenstein, Lituania, México, Nigeria, Portugal y Venezuela.
Los seminaristas llegan al colegio enviados por sus respectivos obispos, bien porque viniendo de países de misión, no disponen de las estructuras adecuadas para llevar a cabo los estudios universitarios, bien para que, una vez finalizada la preparación necesaria para el sacerdocio, puedan continuar su formación académica en las universidades romanas.
Hasta la fecha, casi cien alumnos del Sedes Sapientiae, pertenecientes a diócesis de veintiséis países, han recibido la ordenación sacerdotal.