La Ventilla

Recorrido histórico de los lugares fundamentales relacionados con la fundación del Opus Dei.

El paseante recorre toda la calle Sinesio Delgado con el Hospital del Rey a la derecha y el Parque de la Ventilla a su izquierda.

Para que el paseante pueda hacerse idea de la zona durante los años treinta, debe imaginar este barrio moderno tal como era entonces: un gran descampado y una zona de arrabal con traperos que vivían entre montañas de inmundicias, en pequeñas chabolas.

En estos barrios —barrio de Almenara, antiguo poblado de los Pinos, Tetuán, etc—, el Fundador del Opus Dei llevó a cabo una intensa labor sacerdotal con los más desfavorecidos, cuando sólo había casas bajas e infraviviendas de personas de condición social muy modesta.

Un enfermo de la calle Almenara

Escribía San Josemaría en sus Apuntes el 20 de marzo de 1931:

Un enfermo gravísimo. Vivía en la Almenara. (...) llegué a casa del enfermo. Con mi santa y apostólica desvergüenza, envié fuera a la mujer y me quedé a solas con el pobre hombre. “Padre, esas señoras del Patronato son unas latosas, impertinentes. Sobre todo una de ellas”... (lo decía por Pilar, ¡que es canonizable!).

Tiene Vd. razón, le dije. Y callé, para que siguiera hablando el enfermo. “Me ha dicho que me confiese... porque me muero: ¡me moriré, pero no me confieso!”

Entonces yo: hasta ahora no le he hablado de confesión, pero, dígame: ¿por qué no quiere confesarse? “A los diecisiete años hice juramento de no confesarme y lo he cumplido”. Así dijo.

Y me dijo también que ni al casarse se había confesado. Al cuarto de hora escaso de hablar todo esto, lloraba confesándose: rezó conmigo a la Ssma. Virgen”.