Nos situamos en la tertulia del 8 de noviembre de 1972; uno de los participantes le pregunta a san Josemaría:
- “¡Padre! Hablando en plata: ¿para qué ha puesto la Obra este Colegio Mayor aquí en Sevilla?”, pregunta un joven estudiante.
- “Para haceros felices”, responde el Padre sin dudar.
Es uno de los lances de la ágil tertulia que san Josemaría mantuvo con jóvenes universitarios en el Colegio Mayor Guadaira. Cinco décadas después, el propio centro universitario ha celebrado en la misma sede un evento para rememorar aquellas horas compartidas con el fundador del Opus Dei. Esta celebración constituía el colofón de las actividades con motivo del 75 aniversario del Colegio Mayor, que tuvieron que reducirse con motivo de la pandemia.
El encuentro, que congregó a colegiales de la época y de los actuales, fue presidido por D. Javier Yániz, Vicario de la prelatura del Opus Dei para Andalucía Occidental y Extremadura. Comenzó con la breve presentación del acto por el Director del Colegio Mayor Guadaira, Pedro Ortega; a continuación, se proyectó la película de la tertulia con san Josemaría.
José Luis Rodríguez, recién incorporado a la universidad aquel año de 1972, lo recuerda hoy con la viveza de quien cuenta algo transcurrido hace apenas unas horas: “Lo tengo vivo y presente en mi memoria; el Padre [san Josemaría] nos dijo que fuéramos sinceros y que viviéramos un noviazgo noble. Todavía resuenan en mi memoria, quiero decir, en mi corazón, aquellos consejos”.
Joaquín Herrera, historiador, hizo una breve aproximación a “Los comienzos de Guadaira”, una exposición sobre la andadura de los primeros fieles de la Obra que vinieron a Sevilla para comenzar la labor apostólica. Recibieron una visita de san Josemaría en diciembre de 1943, quien les habló de desplegar sus horizontes de apostolado, animándolos a adquirir una buena formación profesional para el día de mañana. También insistió en la necesidad de ser sinceros, alegres y estudiosos. Como entraba la noche y se iba la luz, sugirió que se sacasen unas fotos, que han quedado para la posteridad.
Herrera rememoró igualmente la visita de san Josemaría en 1972. Llegó al Colegio Mayor Guadaira el día 8 de noviembre de 1972, a media mañana. Primero se celebró el acto de la consagración del altar en el oratorio. Luego, la tertulia en el salón de actos, con la gente arracimada, con intervenciones chispeantes de los oyentes. El Padre se desenvolvía con un gracejo que estimulaba más la alegría de todos y se dirigía personalmente a unos y a otros. Los residentes se conmovieron porque notaron que les ayudaba a acercarse más a Dios.
Antes de la contextualización histórica, el colegial actual Enrique Prieto hizo una breve intervención para subrayar aquello que, en sus palabras, “son hoy rasgos propios de las enseñanzas de san Josemaría, como la preocupación de unos por otros o la formación que el colegio mayor nos ofrece a los universitarios”.
Por su parte, el vicario de la Prelatura para Andalucía Occidental y Extremadura, D. Javier Yániz, recordó algunas enseñanzas del fundador de la Obra sobre la juventud. Destacó la capacidad de entrega de la que disponen los jóvenes, así como la exigencia a la que se deben, por justicia, para estudiar y prepararse para el futuro: “Los jóvenes siempre han querido no perderse en la mediocridad, no perderse –por decirlo de algún modo- en una línea aburguesada, esto es lo que ha caracterizado la formación humana y cristiana de estos colegios mayores: plantear a la juventud los grandes ideales”.
D. Javier bendijo la placa que, con motivo de los 50 años de la estancia de san Josemaría en Guadaira, el patronato, la dirección, los alumni y los colegiales actuales del colegio mayor decidieron ubicar en el patio central del edificio. Allí se recuerda la que fue una inolvidable tertulia para muchos, ahora también presentes en este evento de efemérides. Allí queda para la posteridad, en importantes letras de huecograbado, el siguiente texto:
75 aniversario de la fundación del Colegio Mayor Guadaira
“Gracias al impulso de san Josemaría Escrivá de Balaguer, en octubre de 1945 emprendió su andadura esta Residencia Universitaria del Guadaira, en una casa de la sevillana calle Canalejas, cercana a la Universidad Hispalense. Allí vivió el Fundador del Opus Dei en dos ocasiones. El Colegio Mayor se trasladó a esta sede en 1968. Aquí acudió san Josemaría acompañado del beato Álvaro del Portillo el 8 de noviembre de 1972, consagró el altar del oratorio y mantuvo un encuentro con universitarios en el salón de actos.
Al cumplirse los 75 años del Colegio Mayor Guadaira, los colegiales damos gracias a Dios por el espíritu del Opus Dei de santificación del estudio, del trabajo y de las relaciones sociales y familiares, inspirador de la formación que recibimos en estos edificios, con el deseo de prepararnos cada vez mejor para servir a la Iglesia y a la sociedad”.