El cristianismo introdujo la esperanza en el siglo XX

El siglo XX ya ha quedado escrito para la historia. ¿Hasta qué punto el cristianismo ha dejado su huella en él? Cuestión para un debate organizado por la asociación cultural Zayas, con motivo del centenario del nacimiento de Josemaría Escrivá".

Luis Suárez

"No veamos sólo los aspectos desfavorables -recomendó el historiador-: veamos de una manera especial todo aquello que está marcando un camino nuevo. El camino que lleva al descubrimiento pleno de la dignidad del hombre".

En su intento por resumir las aportaciones del cristianismo al siglo XX, el historiador se detuvo en cinco grandes personajes que han ido incorporando a la Iglesia nuevas dimensiones, acordes al desarrollo, madurez y necesidades de la sociedad de cada momento. "De cuando en cuando Dios extrae del seno de la Comunidad personas singulares que moldean, renuevan la Iglesia".

Cinco jalones para la Iglesia

Habló así de San Benito, San Francisco, Santo Domingo y San Ignacio, representantes de los diferentes momentos en la Iglesia, desde la comunidad primera a la incorporación de la vida religiosa, los pensadores, los mendicantes, el sector urbano, y la intelectualidad. El quinto de estos grandes hombres, será Escrivá de Balaguer, quien señaló que "no hay actividad humana por humilde que sea, que no pueda ser un vehículo para la santidad".

Pilar Cambra

"Es Dios quien está creando el Opus Dei, introduciendo la dimensión que le faltaba, el laicismo, que empieza a tener un protagonismo en el apostolado. En el tercer milenio la Iglesia va a tener una dimensión laical, porque la transformación del mundo, si llega, tendrá que llegar de la mano de los que estamos aquí y de muchos, como nosotros, que viven inmersos en el seno de la sociedad, que no cambian su modo de vivir, pero que lo llenan de afecto".

El historiador narró cómo en 1973 el encuentro con el Beato Josemaría en Roma cambió radicalmente su vida. "Me dio una lección: hay que saber perdona. El acto del perdón ha de venir de una conciencia, deliberada voluntad, propósito que verdaderamente hace cambiar la existencia humana. Creo que eso es el Opus Dei. Cuantos en él estamos somos personas débiles, frágiles; también lo eran los apóstoles".

Ana Sastre

Siglo XXI: la solución es volver a a Dios

Con respecto a los acontecimientos históricos de los que estamos siendo testigos, Luis Suárez los calificó como "una de las coyunturas más terribles que pueden darse" y recordó a Pío X en su primera encíclica: "El mundo vive una crisis porque se ha olvidado de Dios. La única salvación posible es, por tanto, volver a Dios". Se trata, de "cambiar el mundo como la levadura que cambia la masa del pan, no mediante grandes gestos, sino penetrando en las entrañas de la sociedad".

Asimismo, Ana Sastre, médico y autora de una biografía sobre el Beato Josemaría, confió en que el hombre vuelva a retomar las riendas de su historia. A su juicio, abandonado el siglo XX, "el hombre vuelve a ocupar el centro, como irrepetible, como sujeto de dignidad y de libertad".

La periodista Pilar Cambra introdujo la mesa organizada con motivo del centenario de Josemaría Escrivá, de quien dijo que "aprendió y enseñó, habló y escuchó, y luchó y perdió, y luchó y ganó; Como tantos. Como todos".