Rezar por intercesión del matrimonio Alvira
Puede rezarse esta oración privadamente para pedir, por la intercesión de Tomás y Paquita, una gracia a Dios.
Textos de don Álvaro
Ofrecemos algunos textos de don Álvaro del Portillo, procedentes de fuentes diversas y publicados en el libro "Orar. Como sal y como luz". En concreto, el apartado sobre la humildad.
Los había recibido D. Álvaro
Mis padres se llevaban mal desde hacía años. Como en una ocasión habían sido recibidos por don Álvaro, le pedí a mi madre que le rezara para que la situación cambiara.
De la forma más natural
Esperábamos nuestro quinto hijo. Nuestra situación familiar desde el punto de vista material y logístico no era fácil, ya que vivíamos lejos del colegio, en una casa pequeña y teníamos problemas para conciliar la vida familiar y profesional.
¡Funciona, y cómo!
Tengo 45 años de edad, estoy casada y no tengo hijos. Siempre he cuidado mucho el trabajo profesional y muy poco -por no decir nada- mi hogar. Después de ocho años de matrimonio me limitaba a cocinar, en el último momento –también en las celebraciones- platos banales, siempre los mismos, sin sabor.
En siete minutos pude arreglarlo
Me encuentro pasando unos días fuera de mi país en una casa en el campo donde no hay muchas posibilidades de encontrar comercios o semejantes.
La conversión de mi hermano y su esposa
Hace varios años he venido rezando por intercesión de mons. Álvaro del Portillo, pidiendo la conversión de mi hermano y su esposa, con el deseo de que acudiesen al Sacramento de la Confesión.
Quería ver la casa el mismo día
Mi hija y su esposo tenían que vender su casa, pues desafortunadamente habían incurrido en muchas deudas que había que saldar.
«Tenía algo especial», testimonios sobre don José María Hernández Garnica
Con motivo del centenario del nacimiento del siervo de Dios José María Hernández Garnica, cuatro personas que lo conocieron hacen memoria para recodar anécdotas entrañables de don Chiqui, sobrenombre con el que era conocido familiarmente don José María.
Una grave enfermedad
Después de la guerra, don José María Hernández Garnica sufre una serie de dificultades renales y le tienen que extirpar un riñón. Él escribe a san Josemaría restando importancia a sus problemas de salud.