San José, Costa Rica: Fiesta de San Josemaría, Fundador del Opus Dei

Mons. José Rafael Quirós presidió la concelebración eucarística celebrada en honor de San Josemaría el pasado 26 de junio de 2008 en la Catedral Metropolitana.

Fieles provenientes de varias zonas del país llenaron todas las bancas de la catedral y muchos tuvieron que seguir de pie la Santa Misa. 

Mons. Quirós se refirió a San Josemaría, a sus enseñanzas sobre el trabajo y la necesidad de que los cristianos impregnen del Evangelio el mundo. Acudió a la intercesión de San Josemaría para que los asistentes estén cada vez mejor dispuestos a cumplir con la voluntad de Dios: “Mar adentro. Se tiene que ir donde las aguas son profundas si se quiere una pesca abundante”. El Obispo de Limón mencionó también el año Paulino que se celebrará a partir del 28 de junio para conmemorar el segundo milenio del nacimiento del Apóstol de los gentiles.

Hacia el final de la Santa Misa, Mons. Luis Baura de la Peña, Vicario Regional del Opus Dei en Costa Rica, agradeció a Mons. Quirós haber participado en la concelebración; hizo referencia a un nuevo motivo de acción de gracias: esa mañana se había realizado en Roma la sesión de clausura del proceso diocesano sobre la vida y las virtudes de Monseñor Álvaro del Portillo, primer sucesor de San Josemaría.

(Cortesía de www.arquisanjose.org)

Esteban, estudiante de medicina, comentó que era la primera vez que asistía a la Misa de San Josemaría: “aparte del domingo, todos los jueves asisto a la Misa y qué mejor que venir hoy jueves a la Misa de San Josemaría”.

Le tengo una gran devoción a San Josemaría y todos los años asisto” dijo doña Celia María, vecina de Tibás. Continuó: “Este año particularmente asisto a la Misa porque se acaba de ordenar, el 24 de mayo, el hijo mayor nuestro de sacerdote de la Prelatura, y vengo a pedir por todos los sacerdotes del mundo”.

 Roberto, estudiante del último año de bachillerato, comentó que le gusta el modelo de vida que presenta San Josemaría, pues es muy atractivo y se conjuga con sus ideales.

Doña María Estéfana es vecina de Patio de Agua, Coronado, y está muy contenta porque una hija suya ha encontrado su camino en el Opus Dei. San Josemaría, dice, le ayuda mucho con favores de todo tipo.

Desde San Mateo se trasladó a la Catedral el Padre Sixto, uno de los concelebrantes. “Para mí, el haber venido desde mi parroquia es entrar en comunión con toda la Iglesia universal que celebra esta gran fiesta de San Josemaría, este gran santo de lo ordinario, como le llamó Juan Pablo II en aquel día de la canonización”.

Para Lorna, estudiante de medicina, ésta era la primera vez que participaba en una Misa en honor de San Josemaría: quiso asistir para conocer más sobre la Obra.

Soy de Cartago” dijo Johanna, “y vine a la Misa porque dentro de las grandes cosas que nos tiene la Iglesia está la devoción a los santos, y San Josemaría es uno bastante especial, sobre todo para los que tratamos de santificar el trabajo y las cosas ordinarias”.

Luis y su esposa Mónica asistieron con uno de sus hijos a la Misa. “Los demás están muy pequeñillos y por eso no los trajimos. Le tenemos mucho cariño a San Josemaría, seguimos sus enseñanzas que tanto bien nos hacen y hoy estamos de fiesta”.

(Cortesía de www.arquisanjose.org)

Víctor, que todas las semanas viaja por asuntos de trabajo a Nicoya, esperaba amigos de esa zona y de Puntarenas. “Algunos de ellos tendrán que trasladarse más de tres horas para llegar a la Misa”.

Natalia comentó que su familia es de la zona atlántica y viven en Guápiles. Al venir a estudiar a San José, sus padres buscaron alguna residencia donde pudieran encontrar un ambiente de familia. Así fue como conocieron el Centro Universitario Miravalles para universitarios y la Residencia Veragua para universitarias. Desde que conoce a San Josemaría muchas cosas que antes le parecían monótonas y rutinarias ahora cobran sentido.

Además de tantos costarricenses provenientes de una amplia representación geográfica del país, participaron de la Eucaristía fieles de varios países de Centroamérica, Panamá y de América del Sur, que se encontraban en Costa Rica por asuntos de trabajo. Hernán, limonense que vive y estudia en Taiwán, se encuentra de paso por Costa Rica y no quiso perderse la Misa en honor de San Josemaría.