“Madre de Dios y Madre nuestra”
¡Qué humildad, la de mi Madre Santa María! –No la veréis entre las palmas de Jerusalén, ni –fuera de las primicias de Caná– a la hora de los grandes milagros. Pero no huye del desprecio del Gólgota: allí está, “ iuxta crucem Jesu” —junto a la cruz de Jesús, su Madre. (Camino, 507)
En el año del Rosario
En su Carta apostólica "El Rosario de la Virgen María", Juan Pablo II ha invitado a los cristianos a rezar esta oración para aprender de Maria “a contemplar la belleza del rostro de Cristo y a experimentar la profundidad de su amor”. En esta sección se irán publicando textos de san Josemaría sobre los misterios del Rosario.
La Virgen Inmaculada
-Canta ante la Virgen Inmaculada, recordándole: Dios te salve, María, hija de Dios Padre: Dios te salve, María, Madre de Dios Hijo: Dios te salve, María, Esposa de Dios Espíritu Santo...