Tiempo para los demás
"La laboriosidad era una virtud que caracterizaba a Dora", recuerda Ma. Carmen Cominges, "aprovechaba el tiempo al máximo. Y era fácil oírle: como me quedan unos minutos, voy a aprovechar para hacer tal o cual cosa".
Hasta las cosas más pequeñas
En julio de 2011 empecé los trámites para renovar mi pasaporte que caducaba en octubre. Por primera vez me pidieron algunos documentos que sólo podía conseguir en mi país de origen. Pero esto lo supe cuando el pasaporte ya había caducado y no podría con un pasaporte caducado para conseguir los papeles porque no era seguro.
Dora, las calabazas y el cabello de ángel
Isabel García Martín, que vio trabajar a Dora desde 1991 hasta el 10 de enero de 2004, cuando se fue al Cielo, comparte algunas de sus impresiones.
Dora en Roma
En el diario de Città Leonina, escribe escuetamente el cronista, en esa memorable fecha del 27 de diciembre de 1946: «Por fin hoy llega la Administración. Poco tiempo después de llegar a casa, la cocina y alrededores han sufrido un cambio total». Y a renglón seguido: «Hoy hemos cenado como Dios manda».
Dora del Hoyo: una leonesa camino de los altares
Conocí a Dora en el año 1995, cuando el trabajo del hogar estaba muy lejos de mi vida y sobre todo de mi pensamiento. Coincidí con ella en dos ocasiones muy puntuales, aproximadamente durante dos meses. Pero esto bastó para darme cuenta de cómo era, cómo vivía, para quién y por qué había gastado sus días. En fin… Sin grandes explicaciones entendí el sentido de su existir.
Satisfacción compartida
Cada profesión tiene que justificar su propia existencia produciendo, planificando y organizando. Todo el mundo lo sabe. Sin embargo, tengo en mente un tipo de profesión -y no digo ocupación sin más- cuya conveniencia es más que patente y supera esos parámetros.
La casa sobre ruedas
“Tengo la suerte de llevar unos cuantos años trabajando en el cuidado de mi casa, una tarea que me gusta mucho," explica con orgullo Lucía Randle.
Encontré su estampa
Estoy muy impresionada con Dora. Hace como tres semanas encontré su estampa en un oratorio y dije "Si me siento 'en el hoyo' por lo mal que estoy -qué mejor que rezar a Dora 'del Hoyo'..." Adopté, incluso, su nombre para un password, a fin de acordarme de ella.
Dora descubrió cómo ser la mujer más feliz del mundo
Dora decía que se sentía la mujer más feliz del mundo, cuenta Ezia Mucciarelli, que trabajó junto a Dora durante 25 años, desde agosto de 1971 hasta marzo de 1996.
El libro de Dora, ahora en polaco
"Dora: Rozpalony płomień", es el título de la biografía de Dora del Hoyo en polaco recientemente publicada por la Editorial Apostolicum. Ya son cinco los idiomas en que se puede encontrar el libro de Javier Medina Bayo sobre la primera mujer del Opus Dei dedicada a los trabajos del hogar en proceso de Canonización.