Primera edición Dominicana de Camino

Hace unos días fue puesto a circular el libro “Camino” de San Josemaría Escrivá de Balaguer, en un acto realizado en el Hotel El Embajador de la capital.

López Rodríguez dijo en el acto que le edifica hablar de Camino, porque admira al padre Escrivá.

Amigos y cooperadores del Opus Dei, fundado por Escrivá, se dieron cita anoche en el acto de la primera edición dominicana de Camino.

El padre Jaime Guixá, vicario de la delegación de la Prelatura del Opus Dei en República Dominicana, agradeció la presencia del cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez, del Nuncio de Su Santidad, monseñor Josef Wesolowski, de importantes personalidades del ambiente cultural y de los medios de comunicación.

Esta primera edición dominicana de Camino fue presentada por el doctor Tulio Espinosa, Ph.D. en Filosofía y en Ciencias de la Educación, quien disertó sobre la intención, estructura y composición del libro, en el que se vierte la rica espiritualidad de San Josemaría.

“Para hablar de Camino hay que hablar de su autor, San Josemaría Escrivá de Balaguer. No sólo porque lo que escribe son trozos de su vida, sino porque refl eja su mensaje y su obra”, dijo Espinosa en su disertación.

San Josemaría publicó Camino cuando tenía 37 años, 12 años después de ordenarse sacerdote y nueve años luego de que Dios le hiciera ver el Opus Dei.

Esos años fueron de mucho trabajo externo e interno, años llenos de vicisitudes, incluida una Guerra Civil (entre 1936 y 1939) en la España donde vivía entonces, con todas las difi cultades que eso suponía. San Josemaría se dejaba llevar por Dios, a quien trataba con intimidad y confi anza total, y se ocupaba de la dirección espiritual de muchas personas.

La génesis del libro es relatada con muchos datos históricos por el profesor Pedro Rodríguez, en su amplia edición crítico-histórica de Camino, y por Andrés Vásquez de Prada, en su biografía del fundador del Opus Dei. En resumen, Camino se escribe en varias etapas: las primeras dan lugar a varias versiones de lo que llamó Consideraciones espirituales y la última el libro, considerado un clásico de la literatura espiritual con más de 350 ediciones, incluidas del método Braille, y ha sido traducido a más de 40 idiomas, con una tirada global que supera los 4 millones.

Publicada en el Diario "La República"