Luchar otra vez
Pedir perdón y luchar otra vez es muy cristiano, explica el beato Álvaro del Portillo en este vídeo.
Exposición eucarística para dar inicio al Año Mariano
El Prelado del Opus Dei ha dado inicio a un Año Mariano por la familia con una bendición eucarística celebrada en la basílica de San Eugenio (Roma).
La Familia de Nazaret es santa, porque está centrada en Jesús
"Confiemos a María, Reina de la familia, todas las familias del mundo, para que puedan vivir en la fe, en la concordia, en la ayuda recíproca", pidió el Papa Francisco.
En cada concierto recuerdo lo que vivía antes y lo que vivo hoy
En cada concierto recuerdo lo que vivía antes y lo que vivo hoy
Puentes de hilo: Madrid-Bagdad
Joumana Trad es una enérgica mujer libanesa casada con un diplomático destinado actualmente en Irak que sabe de primera mano que la indiferencia duele allí más que nada. Por eso no dudó en movilizarse para atender a la necesidad de un joven párroco de Bagdad –el padre Robert– que pedía ornamentos sagrados para poder celebrar la Misa a su diezmada comunidad.
Madre de Dios y Madre nuestra
¡Qué humildad, la de mi Madre Santa María! –No la veréis entre las palmas de Jerusalén, ni –fuera de las primicias de Caná– a la hora de los grandes milagros. Pero no huye del desprecio del Gólgota: allí está, ‘"juxta crucem Jesé"’ —junto a la cruz de Jesús, su Madre.
Seguir a Cristo
Para seguir las huellas de Cristo, el apóstol de hoy no viene a reformar nada, ni mucho menos a desentenderse de la realidad histórica que le rodea... —Le basta actuar como los primeros cristianos, vivificando el ambiente
Año mariano por la familia en el Opus Dei
Iniciará el próximo 28 de diciembre de 2014 para rezar a la Virgen María por las familias del mundo.
La soberbia, catequesis de Don Álvaro en Colombia
Cuando Don Álvaro del Portillo estuvo en Colombia en mayo de 1983, se reunió con muchas personas en una gran catequesis, publicaremos cada semana un video con varias de esas enseñanzas.
La educación y la responsabilidad civil
Un hombre o una sociedad que no reaccione ante las tribulaciones o las injusticias, y que no se esfuerce por aliviarlas, no son un hombre o una sociedad a la medida del amor del Corazón de Cristo.