
Catequesis del Papa Francisco sobre las bienaventuranzas
Este libro reúne las audiencias del Papa Francisco dedicadas a explicar las bienaventuranzas, pronunciadas entre enero y abril de 2020.
Carta Encíclica "Fratelli Tutti": Sobre la fraternidad y la amistad social: el Papa Francisco aborda cómo afrontar el mundo que vendrá una vez superada esta pandemia.
Este libro reúne las audiencias del Papa Francisco dedicadas a explicar las bienaventuranzas, pronunciadas entre enero y abril de 2020.
Evangelio de la Solemnidad de todos los Santos (Ciclo A) y comentario al evangelio.
Evangelio de la Feria IV de la XXIII semana del Tiempo Ordinario (Ciclo A) y comentario al evangelio.
El Catecismo de la Iglesia Católica nos enseña que “las bienaventuranzas” están en el centro de la predicación de Jesús. Con ellas Jesús recoge las promesas hechas al pueblo elegido desde Abraham; pero las perfecciona ordenándolas no sólo a la posesión de una tierra, sino al Reino de los cielos.
El Papa Francisco concluyó sus catequesis dedicadas a las bienaventuranzas, con la octava de ellas: Bienaventurados los perseguidos por la justicia, por de ellos es el Reino de los cielos. Dijo que ser perseguidos por vivir coherentemente la fe lleva a encontrar “un verdadero tesoro mucho mayor al que puede ofrecer el mundo”.
"La paz no es fruto de las propias capacidades, sino que es la manifestación de la gracia de Cristo", afirmó el Papa Francisco en la audiencia en la que reflexionó sobre la séptima bienaventuranza, que alaba a los "dichosos los que trabajan por la paz, porque ellos serán llamados hijos de Dios".
El Papa Francisco volvió a presidir la audiencia general en streaming desde la Biblioteca del Palacio Apostólico. Reflexionó sobre otra bienaventuranza, la que alaba a los puros de corazón, porque podrán ver a Dios.
El Papa dedico su catequesis semanal a la bienaventuranza: “Bienaventurados los misericordiosos, porque ellos obtendrán misericordia”. Explicó que al experimentar el perdón de Dios, somos capaces de perdonar. Dijo que la misericordia está en el centro de la vida cristiana, y por lo tanto, es un regalo que uno puede y debe pedir a Dios.
“Bienaventurados los que tienen hambre y sed de justicia, porque serán saciados”. La cuarta Bienaventuranza tomada del Evangelio de Mateo, es el tema de la catequesis del Santo Padre en la Audiencia, que fue transmitida desde la Biblioteca Apostólica.
Durante la Audiencia, el Papa Francisco meditó sobre la bienaventuranza “Felices los mansos, porque ellos heredarán la tierra”. Explicó que Jesús se refiere a la promesa del Cielo para todos los hijos de Dios.
En la audiencia general, el Papa Francisco habló de la segunda bienaventuranza, “Bienaventurados los que lloran, porque serán consolados”. Aseguró que se trata “una actitud fundamental en la espiritualidad cristiana: el dolor interior que nos abre a una auténtica relación con el Señor y con el prójimo”.
Durante la catequesis el Papa Francisco explicó la primera de las bienaventuranzas, la que alaba a los pobres de espíritu. Explicó que la pobreza de la que habla el Evangelio no es solo la económica. Se refiere a la aceptación de los límites personales.