Favores en la beatificación de don Álvaro
Hace unos años una amiga me invitó a ir a la beatificación de Mons. Álvaro del Portillo y le dije que no, que no me "apetecía", pero don Álvaro se hizo el encontradizo.
Sin memorias ni palabras
La enfermedad no es castigo, es una caricia de Dios, -recordaba don Álvaro en 1987- para que nos acerquemos Él. Este matrimonio se encomendó a don Álvaro en momentos difíciles.
Se llama Álvaro
La vida es un don que viene a través del amor de los padres. Pero ese don requiere de esfuerzos, muchas veces inesperados e incluso heroicos. En ocasiones, incluso la vida de la madre y del hijo que viene en camino penden de un hilo.
Mientras doblaba la ropa
Un amigo me dió una estampa de don Álvaro para pedir por mi esposa. Fue una imagen como caída del cielo.
Don Álvaro en tiempos de pandemia
Anoche Dios me puso en el corazón la urgencia de escribir esta carta y por eso hoy me levanté temprano, y acá la estoy escribiendo. Todo empezó con mi hijo: tenía asma aguda y no respondía a ningún tratamiento.
Con la ayuda del beato Álvaro: favores pequeños y grandes
Como muestra de agradecimiento quería relatar brevemente algunos de los favores que me han sido concedidos a través de la intercesión del beato Álvaro del Portillo en los últimos años.
De novena en novena
Pensando en diversos familiares y amigos enfermos me propuse iniciar una serie de esas novenas pidiendo por su salud. La primera fue por la salud de la madre de un amigo.
Un tumor en el páncreas
Hay ocasiones de la vida donde un revés en la salud del cuerpo se impone irremediablemente, pero donde la familia y la confianza en Dios hacen ver la otra cara de problema.
Entre libros, contratos y apuros
Durante muchos años el beato Álvaro se encargó de sacar adelante asuntos económicos que san Josemaría le encomendaba. Por ello, personas de todo el mundo acuden a su intercesión en situaciones similares. Recogemos algunos favores en primera persona.
Ayudándonos con mis hijos en el hogar y en el estudio
Las clases on-line fueron ocasión de crecer en la devoción a don Álvaro