Perdí la cartera al bajar de un taxi. No llevaba mucho dinero pero en ella guardaba el DNI, la Tarjeta Sanitaria, el abono de transporte de tercera edad y el documento de usuario de marcapasos. Empecé a encomendar a Dora del Hoyo que aparecieran, al menos, los documentos porque su pérdida me suponía un trastorno. Al cabo justo de una semana me llamaron por teléfono para que fuera a recoger la cartera. Comprobé que sólo faltaba la cantidad modesta de dinero y que el resto del contenido estaba intacto. Quiero manifestar mi agradecimiento a la intercesión de Dora.
J. S.