El video de mi boda

Después de cambiar algunos muebles y poner una estantería nueva, hicimos limpieza y pusimos todos los vídeos y películas en la librería. No eran muchas las películas, casi todo DVD y dos o tres VHS, entre ellos, el de mi boda.

Después de cambiar algunos muebles y poner una estantería nueva, hicimos limpieza y pusimos todos los vídeos y películas en la librería. No eran muchas las películas, casi todo DVD y dos o tres VHS, entre ellos, el de mi boda.

Varios días después comenté a mi marido que era una pena no poder ver la boda porque ya no teníamos el aparato de vídeo. Le pedí que pidiera a un amigo suyo, que sabe mucho de estas cosas, que pasara la película a un CD y así podríamos verla en la televisión.

Mi hija ordenó todo y puso el vídeo con los demás. Al día siguiente mi marido preguntó por el vídeo de la boda, le dije donde estaba, justo debajo de la televisión con las demás películas. No lo encontró. Después, yo misma saqué todas las películas y no estaba, y miré detrás del mueble por si se había caído, pero nada. Cuando vino mi hija, que fue la que lo había ordenado, volvió a sacarlas y ordenarlas, pero no estaba.

Mientras limpiaba el mueble me acordé de Dora y sólo al pensar en ella miré entre el mueble y la pared, y vi que se asomaba un trozo de película. Cuál fue mi sorpresa al comprobar que era el vídeo de la boda. Gracias, Dora.

M. (España)