es
Buscar
Cerrar

Las industrias humanas son “despertadores” en lo ordinario (como la alarma de nuestro teléfono) que nos recuerdan que Dios está ahí, esperándonos. San Josemaría nos las explicaba como unas muletas, que debemos usar de vez en cuando para servirnos de apoyo.

Emplea esas santas «industrias humanas» que te aconsejé para no perder la presencia de Dios: jaculatorias, actos de Amor y desagravio, comuniones espirituales, «miradas» a la imagen de Nuestra Señora.
San Josemaría. Camino, n. 272

Pero… ¿qué son las industrias humanas? Y sobretodo, ¿qué es la presencia de Dios?

Ya sabemos que San Josemaría nos hablaba de alcanzar la santidad en lo ordinario, en medio del mundo. Y… ¿eso cómo se consigue? Lo primero es encontrar a Dios en las cosas pequeñas, verle detrás de cada persona, cosa y circunstancia que tengamos. Vivir bien la presencia de Dios es un gran primer paso en el camino al Cielo…

Por dónde empezar…

Para saber hacer algo, viene muy bien ver a otros hacerlo. San Josemaría era un gran fan de las industrias humanas. Se ponía con frecuencia esos pequeños recordatorios con los que iba constantemente alzando su vista al Cielo.


LAS INDUSTRIAS HUMANAS DE UN SANTO 

Azulejo de su habitación

San Josemaría contó en alguna ocasión que frente a su cama tenia un azulejo que decía: “Aparta Señor de mí lo que me aparte de Ti”.

El número 3

Usaba continuamente el número 3 o cualquiera de sus múltiplos, que le recordaba a la Santísima Trinidad1.

Cada día, una intención

San Josemaría reservaba cada día de la semana para pensar y contemplar algo concreto.

Así, los domingos los dedicaba a la Santísima Trinidad; los lunes, a las almas del purgatorio; los martes, los ángeles custodios; los miércoles, aprendía de San José; los jueves, guardaba un especial cariño a la Comunión y la Eucaristía; los viernes, contemplaba la Pasión y los sábados; el día de la Virgen.

Cada día, una intención
Cada día, una intención


Crucifijo o imagen de María

A la hora de trabajar, tenía siempre delante de él un crucifijo o una imagen de la Virgen, para alzar la vista y ofrecer su trabajo al Señor. Él mismo nos aconsejaba siempre llevarlo en un bolsillo o dejarlo en nuestra mesa de estudio.

Hablando claro… ¿cómo aplicarlo en nuestra vida?

Lo más cercano que tenemos es, sin duda, nuestro estudio. Y hay mil y una formas de encontrar a Dios en él. Empezando por, como acabamos de leer, poner en nuestro escritorio un crucifijo o una imagen de nuestra Madre. Nos podemos acordar así, al verlo, de regalarle nuestro esfuerzo. También nos ayuda buscar una intención concreta detrás de cada rato de estudio, más allá de la nota que puedas sacar.

Pero… ¡aviso importante! No nos puede valer solo con hacer algo santo mientras trabajamos, sino también hacer santo nuestro trabajo, poniendo un motivo sobrenatural en él.

San Josemaría decía que veía siempre almas en los papeles de su trabajo. Así nosotros, podemos incluso ponerle nombre a cada tema, cada página o cada párrafo para poner más esfuerzo y amor en lo que hacemos, acordándonos de aquella intención.

Hay muchas otras formas de meter las industrias humanas en nuestra vida, pero ahí tiene que entrar la imaginación de cada uno... Algunas ideas más que nos podrían ayudar son: 

Jaculatorias o pequeños actos de desagravio cuando sepamos de alguien que ofende a Dios

Es muy bonito sentir dolor por las cosas que ofenden a Dios, como cuando sufrimos por la tristeza de un amigo… Pero así, podemos acostumbrar a pedirle perdón nosotros por los que no lo hacen.

Jaculatorias o pequeños actos de desagravio
Jaculatorias o pequeños actos de desagravio
Estar en ON

Nos puede ayudar mucho ver en cosas completamente cotidianas motivos para levantar la vista. cosas que nos cruzamos día a día y que normalmente no les prestamos atención, pero… ¿y todo lo que nos puede ayudar a acordarnos de Él? Cada uno puede encontrar algo concreto que le mueva, ¡hay tantas oportunidades como personas! Un ejemplo podría ser, al ver nuestro autobús, pensar en el apostolado… que nos lleve a reflexionar cómo va de lleno nuestro autobús de personas que estamos llevando al cielo.

Asaltar sagrarios: Visita o Comunión Espiritual al pasar por una Iglesia

A menudo pasamos por delante de Iglesias, sagrarios… y sabemos que Jesús esta ahí, por nosotros ¿por qué no pararnos a saludar?

En esta infografía te dejamos algunos de esos recursos, que podrás descargar para llevarlos siempre a mano.

Infografía sobre industrias humanas
Descarga la infografía completa


1 Cómo podemos ver en los 999 puntos de Camino o la anécdota del sorteo de caramelos: de vez en cuando, San Josemaría llevaba caramelos a las tertulias para agradar a los demás, y para repartirlos realizaba un juego en el que se debía adivinar el número que estaba pensando… pronto vieron que siempre era el 3 o cualquiera de sus múltiplos. Hasta en esos momentos veía una ocasión para encontrar a Dios y expresar su devoción por la Santísima Trinidad.