Opus Dei

Reflexión para meditar el miércoles de la 5.ª semana del tiempo ordinario. Los temas propuestos son: el bien y el mal están dentro de nosotros; para un cristiano, toda negación es una afirmación más grande; examinar a fondo nuestro corazón.

Reflexión para meditar el martes de la 5.ª semana del tiempo ordinario. Los temas propuestos son: el verdadero sentido de la Ley; Dios nos pide la entrega del corazón; la caridad es la Ley del Espíritu Santo.

Reflexión para meditar el lunes de la 5.ª semana del tiempo ordinario. Los temas propuestos son: Jesús revoluciona los lugares por los que pasa; descubrir la alegría más profunda; una fe fundamentada en el amor de Dios.

Reflexión para meditar el 5.º domingo del tiempo ordinario. Los temas propuestos son: la oración de protesta de Job; a Dios le importa cada persona; un día cualquiera en la vida de Jesús.

Reflexión para meditar el sábado de la 4.ª semana del tiempo ordinario. Los temas propuestos son: el descanso era importante para Jesús; descansar con el Señor en la oración; todos somos oveja y pastor.

Reflexión para meditar la Fiesta de la Presentación del Señor en el Templo. Los temas propuestos son: la fiesta del encuentro; Simeón era un hombre esperanzado; impulsados por el Espíritu Santo.

Reflexión para meditar el viernes de la 4.ª semana del tiempo ordinario. Los temas propuestos son: Juan Bautista es un mártir de la verdad; un corazón limpio para amar a Dios; buscar la gloria del Señor y no la propia.

Reflexión para meditar el jueves de la 4.ª semana del tiempo ordinario. Los temas propuestos son: la llamada universal al apostolado; siempre estamos acompañados en la misión; el estilo sencillo de la evangelización.

Reflexión para meditar el 4.º miércoles del tiempo ordinario. Los temas propuestos son: la sabiduría de Jesús; fruto de la intimidad con Dios; la verdadera sabiduría.

Reflexión para meditar el martes de la 4.ª semana del tiempo ordinario. Los temas propuestos son: la fe humilde de la hemorroísa; el pecado y la muerte no tienen la última palabra; sentirse necesitados de la curación de Cristo.