El evento, marcado por la gratitud, contó con la presencia de Mons. Francisco Montecillo, Nuncio Apostólico, quien presidió la misa, y varios sacerdotes, incluyendo al Pbro. Carlos Young Sarmiento, Vicario Regional del Opus Dei para América Central, y también algunos hijos, nietos y familiares del Dr. Ernesto Cofiño, quienes se unieron a la acción de gracias a Dios por esta noticia que será para el bien de la Iglesia en Guatemala.
Mons. Francisco Montecillo, Nuncio Apostólico presidió la Santa Misa
El Dr. Ernesto Cofiño (1899-1991), padre de familia, miembro del Opus Dei y médico pediatra, dedicó su vida al cuidado de su esposa, hijos y familia; también impulsó proyectos para estudiantes universitarios como la Residencia Universitaria Ciudad Vieja, se dedicó con pasión a su trabajo profesional, así como al servicio desinteresado de los niños de las familias más necesitadas de Guatemala. Su labor incansable y su compromiso con los más vulnerables dejaron una huella imborrable en la historia de la medicina y en el corazón de quienes tuvieron el privilegio de conocerlo. Su legado perdura como un faro de esperanza y amor para quienes buscan la santidad en medio del trabajo profesional y la vida familiar.
Cientos de católicos participaron en la Misa de Acción de Gracias por la declaración de las virtudes heroicas del Siervo de Dios Ernesto Cofiño