Los Países Bálticos acogen al Papa Francisco

Historias de lituanos, letones y estonios que se han preparado para recibir al Papa Francisco, quien estará en sus países desde el sábado 22 hasta el martes 25 de septiembre.

Una peregrinación familiar a las ruinas del santuario de Viru Nigula, para preparar la llegada del Papa a Estonia.

Horario del viaje del Santo Padre a Lituania, Letonia y Estonia

En mayo del 2018, Mariano Fazio, Vicario general del Opus Dei, visitó nuestros países y nos trasmitió la cercanía del Papa. Toma, cooperadora del Opus Dei y una de las responsables de la organización del viaje en Lituania, aprovechó la ocasión para preguntar sobre el mejor modo de prepararse. La respuesta fue rápida: “Con la oración”.

Han sido meses de preparación. La lista de voluntarios quedó copada rápidamente y muchos no pudieron registrarse como tal para el evento. En todos los Países Bálticos, se ha difundido una imagen del Papa con una oración en el anverso para preparar este viaje. En las iglesias se ha rezado diariamente esa oración al finalizar la misa.

En las iglesias está previsto aumentar el tiempo dedicado a las confesiones

El Papa viajará a Letonia el lunes 24. Atendiendo a una petición de la Iglesia católica, el Parlamento letón declaró el día “no laboral” para facilitar que la gente pueda participar en el evento. La conferencia episcopal emitió una carta pastoral invitando a prepararse a todos los fieles. Entre otras cosas, se pedía que después de cada Misa el sacerdote rezara una oración especial por el Papa hasta su venida, hacer obras de misericordia, leer sus escritos, etc. Todo ha tenido una gran acogida entre los fieles.

También se publicó en la página web creada especialmente para esta ocasión temas para profundizar en los escritos del Papa con materiales audiovisuales atractivos. En las pantallas de los autobuses y en sus paradas, en las entradas a las ciudades o en las fachadas de las iglesias hemos visto la sonrisa del Papa invitando a participar en los eventos.

En la mayoría de las iglesias está previsto aumentar el tiempo dedicado a las confesiones, pues mucha gente quiere prepararse acudiendo a este sacramento.

Una procesión con el Santísimo por las calles de la ciudad medieval de Viru Nigula (Estonia). Grupos de niños lanzaban pétalos de flores ante el paso del Señor.

No es sólo un evento para los Países Bálticos. Tendremos visitantes de los países limítrofes: Polonia, Finlandia,… pues para ellos esta cercanía es una gran oportunidad de manifestar su cariño al Papa.

El Santo Padre viene justo al cumplirse 25 años del viaje de san Juan Pablo II. Kristina Vasiliauskaitė, compositora, comenta: “Dos de mis cantos fueron interpretados durante la visita de Juan Pablo II en Lituania, en 1993... El tiempo ha pasado muy rápido. En esta ocasión, en su honor y para la gloria de Dios esta vez será cantada otra obra mía: la primera parte del “Magnificat”. Las palabras de este cántico de María reflejan, salvando las distancias, cómo me siento en esta ocasión. Creo que será una fiesta grande para todo el pueblo lituano”.

Ignas, de 23 años, ayuda como voluntario: “Los que querían ayudar eran muchos, bastantes más de los necesarios. Al final, somos 500 voluntarios en Vilnius y otros 500 en Kaunas. Hay mucho trabajo para coordinar la logística, facilitar el movimiento, orientar a los peregrinos extranjeros, etcétera”.

Ignas es un voluntario de 23 años que ayudará en Vilnius.

En su opinión, el Papa dejará “una mayor confianza mutua entre nosotros. Seremos más capaces de ver a Cristo en el otro. Somos muy encogidos, especialmente con las nuevas tecnologías. El Papa nos da un ejemplo de cómo podemos salir de nosotros mismos hacia una vida real, ver el rostro de un hermano, llegar a una confianza verdadera”.

Indre, que trabaja sólo desde hace un año en “Kataliku Balsas”, el departamento que se encarga de la comunicación en torno a la venida del Papa, dice: “Los lituanos hemos sufrido mucho por la fe. Hoy, con la llegada del Papa, podemos alegrarnos de la libertad de Lituania y del privilegio de confesar libremente la fe. Quisiera pedir a todos que oren por Lituania en estos días”.

Laura, letona y madre de tres hijos comentó: “Para prepararme mejor me he confesado, he rezado por el Papa y estoy leyendo sus escritos”. Irena añadía que además iban a recibir en su casa a tres sacerdotes polacos.

Kristine también decía conmovida: “Espero con ilusión la visita del Papa. Aunque parece que el tiempo será malo, sé que todos los participantes de la Misa en Aglona no vamos a tener frío porque el Papa hablará de corazón a corazón. Estudiando los temas de preparación sugeridos por la conferencia episcopal, he descubierto cosas prácticas y profundas que puedo realizar en el día a día, mientras realizo obras de misericordia o sirviendo a mi familia. Entre las personas de mi alrededor, tanto en mi trabajo como en la sociedad, he notado un interés por el Papa y por los temas espirituales ¡Nos vemos en Aglona!”.

Catedral de Vilnius (Lituania).

Una cooperadora que vive en Aglona contó que ahí se ha organizado un grupo para planchar los ornamentos de la Misa y han propuesto a todos los participantes de los pueblos más cercanos que traigan galletas caseras para la merienda del Papa y de los sacerdotes. Por otro lado, Caritas Letonia invitó a tejer calcetines con la finalidad de regalar los mejores al Papa y los demás a la gente necesitada de Ucrania, secundando así la invitación del Papa de rezar por los lugares del mundo que están en guerra.

“Ser voluntario en esta visita del Papa debe transformar nuestras vidas”

Mariana, una de las muchas voluntarias, cuenta que el sábado pasado (15 de septiembre, fiesta de la Virgen de los Dolores) fue a una jornada de formación para voluntarios en Šiluva, un pequeño pueblo donde se apareció la Virgen en momentos cruciales para la Iglesia en Lituania. Allí les dirigieron unas palabras muy estimulantes citando enseñanzas del Papa recogidas en Amoris Laetitia y Gaudete et Exultate. “Me gustó mucho oír con claridad que ser voluntario en esta visita del Papa debe transformar nuestras vidas, pues no se trata de una mera labor social. También nos hizo considerar que muy pocas personas tendrán ocasión de estar cara a cara con el Papa, darle la mano, etc, pero las cien mil personas que participarán tendrán ocasión de trato con nosotros los voluntarios. De nuestra cara sonriente, trato amable y espíritu de servicio dependerá en gran parte que para cada persona estos días sean una fiesta con recuerdos positivos innumerables”.

Las iniciativas son múltiples: en Letonia, un grupo de jóvenes grabó algunos vídeos donde animan a otros jóvenes como ellos a participar en la visita del Papa. Otros, en Lituania, decidieron ir personalmente a las residencias de estudiantes para hablar con cada uno.