Escucha Totalmente. Historias recientes de juventud, alegría y santidad
El libro lleva un subtítulo bastante expresivo: Historias recientes de juventud, alegría y santidad. ¿Son vidas de santos jóvenes?
El adjetivo santo tiene, a fecha de hoy, dieciséis acepciones en el diccionario de la Academia. Joven tiene solo seis, y en ninguna de ellas se especifica qué edad tiene una persona joven. En un marco tan amplio, sí se puede decir que mi libro es sobre santos jóvenes, pero procuro evitar esa expresión porque una de las acepciones más usadas de santo tiene un significado muy preciso para referirse a personas que han sido declaradas santas por la Iglesia, y yo no pretendo en absoluto prevenir el juicio de la Iglesia sobre la santidad de mis protagonistas.
Ninguno de ellos ha sido canonizado todavía. Cuando entregué el texto a la imprenta solamente había un beato, Carlo Acutis (del que ya se ha aprobado un milagro para su canonización), otros son venerables... y de otros ni se ha iniciado el proceso de canonización, ni probablemente se inicie nunca. Los he escogido porque me ha parecido que sus vidas tienen algo de inspirador.
¿Cómo surgió el proyecto?
En el prólogo del libro hablo de conversaciones con amigos acerca del bien que nos hicieron las lecturas de vidas ejemplares en general y de santos en particular, de la rapidez con la que las personas mayores olvidamos cómo razonábamos —o más bien, cómo no lo hacíamos— cuando éramos jóvenes; y de la facilidad con la que los adultos tendemos a pensar que la juventud actual no tiene remedio, narcotizada por una sustancia hechizada y muy adictiva a la que están enganchados por esa extraña vía intravenosa que son las redes sociales. Y me puse a buscar historias ejemplares de jóvenes que hubieran usado internet.
Los 18 protagonistas de los 15 capítulos de TOTALMENTE —así se titula el libro— vivieron en el siglo XXI. La media de edad es de 25 años y seis meses, pero no me ha preocupado incluir sin muchas explicaciones a una niña de 10 años y a otra de 44. Hay diez mujeres y ocho varones. Solo una está casada, pero no porque exista una mayoría que haya optado por el celibato, sino porque son muy jóvenes —hay varios noviazgos formales y también alguno que busca su media naranja sin éxito—.
También debo decir que las biografías están muy resumidas. Escojo de cada persona una o varias anécdotas, copio muchos textos de otras publicaciones —cito siempre las fuentes—, señalo dónde se pueden ver vídeos sobre ellos, enlazo sus páginas web si existen... En fin, más que 18 biografías, se trata de 18 presentaciones que invitan a conocerlos más profundamente.
¿Cuál es la historia que más te ha impactado personalmente?
Es una pregunta difícil, como la de si quieres más a papá o a mamá; pero voy a intentar contestarla. Lo que más me ha impactado no es una historia sino un hecho: el número de personas asesinadas en Nigeria por ser cristianas: cito en el libro un informe de la Sociedad Internacional para las Libertades Civiles y el Estado de Derecho (Intersociety) que señalaba en 2023 que "al menos 52.250 personas han sido asesinadas en los últimos 14 años en Nigeria solo por ser cristianas" y que "en los primeros 100 días del año, es decir, del 1 de enero al 10 de abril de 2023, 1.041 “cristianos indefensos” fueron masacrados. Dentro del mismo período, al menos 707 cristianos fueron secuestrados". El informe indica además que bajo el presidente Buhari, 18.000 iglesias cristianas y 2.200 escuelas cristianas fueron incendiadas.
Y Nigeria no es el único país donde hay mártires. Cuando comencé a recopilar información sobre ejemplos de vida cristiana que pudieran ser luminosos, especialmente para lectores jóvenes, me di cuenta enseguida de que resultaba desproporcionada la cantidad de españoles. No me importa que se note que soy español, y que tiene cierta lógica que haya más españoles porque he acudido a lo que tengo más cerca; pero sí me importa que se pueda deducir que la santidad es casi imposible lejos del Mediterráneo. Además, me interesa subrayar que mi libro no es un ranking bajo ningún punto de vista: son ejemplos.
He pretendido que la recopilación sea internacional. Además de los españoles, hay una estadounidense, una irlandesa, un británico, un indio, un pakistaní, dos brasileños, cuatro italianos, una nigeriana y una congoleña. Y también he encontrado una notable variedad en los caminos por los que se puede avanzar en la unión con Dios.
¿Y no te hubiera gustado conocer personalmente a alguno de tus 18 elegidos?
No conocí a ninguno. Me hubiera gustado conocerlos a todos. He conocido después al padre de Ignacio Echeverría, el héroe del monopatín, que me enseñó la exposición sobre su hijo que hay en Las Rozas; a los padres de Teresita del Castillo, que vinieron a la Feria del Libro cuando firmé ejemplares; y me he escrito con parientes o responsable de las causas de algunos más. Muy buena gente, todos muy buena gente.
De la hermana Clare Crockett hay tantos —y tan buenos— vídeos disponibles en internet, que tienes la sensación de que has palpado su simpatía y la profundidad de su vida interior como si la hubieras tratado en vida. Algo semejante transmite el documental de Pedro Ballester, las largas entrevistas que se pueden ver en Youtube de María Requena, o los detalles de la conversión de una trabajadora súper exigente como Carlotta Nobile. Pero aunque haya mencionado ahora a algunos, no tengo un personaje preferido; pienso que cada historia transmite algo peculiar, que tienen en común la cercanía a Dios en circunstancias muy diversas y que eso puede ayudar a los lectores.
¿Esperas escribir una segunda parte?
Totalmente.