El legado de Iago: amar sin límites lo cambia todo

Este es el testimonio de vida de Iago, un niño que nació sin ojos y con una limitación auditiva grave y que falleció hace tres años. Pero también es el de sus padres, Javier y Elia, que lucharon por su vida y su felicidad desde el primer momento y contra un sinfín de dificultades, siempre con la alegría de un hijo que les cambió la vida
Wei Wei: la verdadera alegría en medio del dolor

A los 18 años, le diagnosticaron un cáncer cerebral. A través de este duro camino, Angie relata cómo experimentaron la cercanía de Dios en su familia, reflejada en tantas personas que los acompañaron, y de cómo, aún en medio del dolor, encontraron paz y alegría.
“No será fácil, pero valdrá la pena”

La vida de Cande y Luisma dio un giro inesperado con la noticia de la llegada de Rochi, su tercera hija. El diagnóstico de los médicos fue desolador, y la solución que proponían no era una alternativa para esta familia. Tras largos años de diálisis y dos trasplantes, hoy Rochi tiene 8 años, Trisomía 21 y una vida muy feliz. El 21 de marzo se celebra el día Mundial del Síndrome de Down.
«Entendimos que aceptar los hijos que Dios quisiera pasaba por no tener ninguno»

Laura es madre de tres hijos y en sus redes sociales habla sobre cómo ha sido el proceso de adopción de todos ellos, aceptar el duelo de la infertilidad o temas relacionados con familia y educación. En este artículo cuenta su testimonio de vida y de fe y cómo escribir un libro y hablar sobre ello en redes ha sido sanador y al mismo tiempo una ayuda para muchas personas.
Una puerta hacia un futuro mejor: de la calle al instituto

Waldo es padre de familia y creció en Villa Madero, Argentina. En su adolecencia se topó con el Instituto Madero donde encontró educadores que lo acompañaron y creyeron en él. Esa oportunidad transformó su rumbo y el de su familia, abriéndoles un futuro que antes no existía para ellos.
Marceliño: si tiene que ser, que sea

Me llamo Natália, estoy casada con Rafael y soy madre de dos hijas. Voy a relatar la historia de uno de los muchos favores recibidos por intercesión del siervo de Dios Marcelo Henrique Câmara.
«En cuanto descubrí el amor de Dios, la droga nunca más tuvo cabida en mi vida»

Walter estaba sumido en el mundo de las drogas, el dinero y relaciones fallidas. Un abuso sexual en la infancia le había destrozado la vida. Todo cambió cuando conoció a un sacerdote que le animó a dejarse amar por Dios y a permitir que Él le ayudara a salir del pozo en el que se encontraba.
«Comenzamos el noviazgo de la mano de la formación»
Hace 50 años, la visita de san Josemaría a Guatemala dejó una huella profunda, inspirando a muchos guatemaltecos a vivir y difundir su mensaje en todo el país. Mercedes y Robinson nos cuentan cómo la formación del Opus Dei ha transformado su matrimonio y su camino de vida.
«Dios me ha abrazado y me ha dicho: estás aquí, ¿no?»

Ángela tiene 28 años y su encuentro con la fe se produjo en dos fases: desde que decidió bautizarse a los 14 años; y tras conocer el cristianismo al cambiar de colegio, hasta que comprendió que seguir a Cristo conllevaba cambios sustanciales en su vida.
Sergio: "Mi vida cristiana tiene cada día más sentido"

En Valparaíso, V región Chile, un grupo de jóvenes escolares y universitarios que asisten al centro de formación del Opus Dei Viloalle llevan adelante una iniciativa que comenzó hace más de 8 años luego de un encuentro casual con Sofía Zárate. Conoce la historia de Sergio Cabezas, un joven voluntario de este proyecto.
Cuatro coincidencias en el camino de Shanghai a Santoña
Hola, me llamo Yiran y quería contaros mi historia, que está llena de coincidencias o, como yo digo, “dioscidencias”. Nací en China, en una ciudad cercana a Shanghai. A los 14 años vine a vivir a España, a un pueblo de Cantabria llamado Santoña y realmente me siento de allí.
Desde que descubrí el regalo de la Fe, no quiero vivir de otra forma
Casada y madre de tres niños, sufrí la pérdida de mi madre al poco de nacer. Mi niñez, sin embargo, transcurrió en paz gracias al apoyo especial de una tía. La llegada de la adolescencia y otras ausencias causaron en mí una dura crisis personal de la que sólo salí gracias a mi reencuentro con Dios.
La fe lo cambió todo sin cambiar nada
Jordi tiene 24 años, nació en Sollana (Valencia) y estudia Ingeniería de Caminos en la Universidad Politécnica de Valencia. Sus padres, no creyentes, no le dieron formación religiosa alguna.
Natasha y Viktoria: de Kazajistán, al calor de la fe
Natasha y Viktoria tienen 17 y 18 años, respectivamente, y son de Kazajistán. En Roma han hecho la primera comunión. Esta es su aventura.
Malina, Malasia: “Ver a mis amigas comulgar fue el comienzo de mi viaje”
Malina aprendió a llevarse bien con musulmanes, ateos y cristianos en su propia familia. “Mi familia es un ejemplo de la mezcla de culturas y religiones que existen en mi país, Malasia”, cuenta. Su padre es ateo, su madre es católica y sus hermanas se convirtieron al islam. Ella decidió bautizarse a los 16 años. Ese fue el comienzo de una búsqueda que la llevaría al Opus Dei como numeraria auxiliar.
Orietta: «Yo necesitaba a Dios»
Una fe cristiana vivida sin ganas condujo a Orietta al budismo. Durante 10 años fue guía de quienes siguen esa filosofía de vida. El ejemplo y el respeto de su marido la acompañaron de vuelta a la fe.