Algo grande y que sea amor. La vocación cristiana: búsqueda, descubrimiento, fidelidad
San Josemaría recordaba cómo, con apenas dieciséis años, descubrió que el corazón le pedía «algo grande y que fuese amor». Esta serie de artículos sobre la vocación cristiana quiere ser una ayuda para la búsqueda, el descubrimiento, y la fidelidad. El libro en papel se publicará más adelante.
Algo grande y que sea amor (XII): Frutos de la fidelidad
La certeza de saberse siempre con Dios es fuente viva de esperanza, de la que brotan sin parar nuevos manantiales de alegría y de paz que fecundan nuestra vida y la de los que nos rodean.
Algo grande y que sea amor (XI): Caminar con Cristo hacia la plenitud del Amor
«El camino se resume en una única palabra: amar, (...) tener el corazón grande, sentir las preocupaciones de los que nos rodean, saber perdonar y comprender: sacrificarse, con Jesucristo, por las almas todas» (San Josemaría).
Algo grande y que sea amor (X): ¡Somos apóstoles!
Para un cristiano el apostolado no es simplemente un encargo que supone ciertas horas; ni siquiera un trabajo importante: es una necesidad que brota de un corazón que se ha hecho «un solo cuerpo y un solo espíritu» con el Señor.
Algo grande y que sea amor (IX): ¿Acertaré?
Cuando entra la inquietud en el corazón acerca de un posible camino, es natural dudar y sentir miedo: Dios nos busca y nosotros, a pesar de nuestra fragilidad, deseamos vivir con Él y para Él.
Algo grande y que sea amor (VIII): Más madres y padres que nunca
La misión de los padres no se limita a la acogida de los hijos que Dios les da: sigue durante toda la vida, y tiene como horizonte el cielo.
Algo grande y que sea amor (VII): la vocación matrimonial
Dios bendice la normalidad de la vida familiar y quiere habitar en ella. Un paseo por el libro de Tobías puede ayudar a redescubrirlo.
Algo grande y que sea amor (VI): Quien da la vida por sus amigos
El secreto de un corazón célibe: dejar un amor en la tierra para llenar el mundo entero con la luz del Amor de Dios.
Algo grande y que sea amor (V): Para que la música suene
La vocación al Opus Dei es una llamada a interpretar una partitura, a tocar una música de Dios que tiene tantas variaciones como personas.
Algo grande y que sea amor (IV): ¿Cómo se descubre la vocación?
Hay tantas historias de vocación como personas. En este editorial se muestran algunos de los hitos más frecuentes en ese camino por el que se obtiene la convicción acerca de la propia vocación.