Dios, amor de Madre
Desde el bautismo, Dios puede vivir en nuestra alma. Sin que nos demos cuenta, nos cuida, nos protege, nos exige... Como una madre a sus hijos. Así lo explica San Josemaría en este vídeo. (01’31’’)
Buscar a Dios en todas las cosas
El Fundador del Opus Dei aconseja en este vídeo aprovechar las situaciones ordinarias -el trabajo, las distracciones- para tratar a Dios y darle gloria (00'48'').
En la calle, eres templo de la Trinidad
Los hombres podemos hablar con Dios ante el Sagrario o cuando comulgamos. Pero san Josemaría explica en este breve vídeo que también cuando vamos por la calle, o en el trabajo, o en casa, podemos ser templo donde vive Dios: "Búscame dentro de ti, que allí estoy" (02,30'').
Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo
El misterio de la Trinidad es el principal misterio de la fe cristiana. "¿Como podría ayudarnos a considerarlo mejor?", le preguntó una chica a san Josemaría (Vídeo: 01'41'').
Cuando los hombres lloran
En 1972, un hombre perdió en un accidente de coche a su mujer y un hijo. San Josemaría quiso ayudarle con unas palabras de consuelo. Ante tanto dolor, el santo preguntaba a Dios: “¿Por qué?” (01’48’’).
El Evangelio: palabras viejas y nuevas
Siendo niño, el Fundador del Opus Dei escuchaba siempre el mismo cuento protagonizado por unos ladrones. Y le encantaba oírlo una y otra vez. Así es el Evangelio, siempre igual, y siempre nuevo (01’23’’).
Meter a Dios en las cosas terrenas
Ser santos en la vida ordinaria: una meta atractiva para todo cristiano. ¿Cómo alcanzarla? Queriendo al cónyuge, cuidando a los hijos, trabajando con profesionalidad… “Y Dios nos ayudará”, dice san Josemaría (vídeo: 01'27'').
Dar a conocer a Jesucristo
Acoger a todos, dar cariño, no rechazar a nadie. Estos son los consejos que da el Fundador del Opus Dei para imitar a Jesucristo, porque Él “tampoco rechazaba” (vídeo: 1’31’’).
Ejemplo cristiano en el trabajo
¿Cómo mantener la dignidad, dando la cara en un ambiente poco cristiano? Esta pregunta, tan actual, se la hicieron a san Josemaría en 1972. Y ésta fue su respuesta (vídeo: 0’44’’)