Hace 50 años san Josemaría llegó a Cañete

En el mes de julio de hace 50 años, el fundador del Opus Dei, monseñor Josemaría Escrivá de Balaguer visito el Perú, en un viaje pastoral, de evangelización y sin querer de despedida (falleció un año después), nos dejó mucha enseñanza por lo que le estamos amorosamente agradecidos.

Hace medio siglo, el fundador el Opus Dei estuvo de paso por nuestro país, visitando su obra. Llego a San Vicente de Cañete el sábado 13 de julio de 1974, por este motivo se vienen realizando diversas actividades, para recordar “al Padre”.

¿POR QUÉ CAÑETE?

El Opus Dei se fundó en España el 2 de octubre de 1928, la Santa Sede y el Papa Pío XII, ofrecieron al fundador del Opus Dei una de las prelaturas por crearse en Perú, así la Prelatura de Yauyos (Yauyos y Huarochirí) se creó el 12 de abril de 1957, coincidentemente 29 años después de la fundación de la Obra, monseñor Ignacio María de Orbegoso y 5 jóvenes sacerdotes españoles de la Sociedad de la Santa Cruz (los primeros sacerdotes del Opus Dei en Perú) tomaron posesión de esta jurisdicción eclesiástica peruana el 2 de octubre de 1957, años después, el 24 de marzo de 1962 la provincia de Cañete fue anexada a la Prelatura de Yauyos (Cañete, Yauyos y Huarochirí), tomando posesión canónica el 15 de junio de 1962 y trasladando la sede Prelaticia a San Vicente de Cañete.

Hablar de la visita de San Josemaría a Cañete, es hablar de parte de la historia del Opus Dei en Perú

Hablar de la visita de San Josemaría a Cañete, es hablar de parte de la historia del Opus Dei en Perú, San Josemaría visitó nuestra provincia para supervisar la gran labor de formación espiritual, pastoral, social de promoción humana que la obra realizaba en toda la prelatura de Yauyos.

En marzo de 1964 se crea en Cañete, el Seminario Menor colegio Nuestra Señora del Valle, semillero de vocaciones sacerdotales, el gran cariño que monseñor tenía a sus hijas e hijos en Perú se demostró cuando regaló una imagen de la Virgen tallada con rasgos peruanos y la vestimenta con los colores de la sierra limeña, que el mismo supervisó en Roma, fue bendecida y llevada a pie por varios kilómetros hasta la ermita del colegio nuestra Señora del Valle, el 25 de noviembre de 1965: pensando en la necesidad de tener sacerdotes de la zona, en 1971 se fundó el Seminario Mayor “San José”, ordenando a sus primeros 4 sacerdotes y diáconos en 1978, actualmente también forman sacerdotes profesores y formadores.

Simultáneamente en Cañete se crean las obras corporativas del Opus Dei como Condoray (sección femenina) fundada en 1963 realizando labor social entre las mujeres del campo, alfabetizándolas, en habilidades productivas, desarrollo comunal, liderazgo, primeros auxilios, formación espiritual y moral.

También en 1965 el Instituto Valle Grande (sección masculina) para capacitar técnicamente a la población rural, sin dejar su formación espiritual.

Con el traslado de la imagen de la Madre del Amor Hermoso, que nos regaló San Josemaría, en 1991 se inauguró en San Vicente de Cañete, el Santuario que lleva su nombre, cuya fiesta se celebra el último domingo de mayo.

...buscar la santidad en medio del mundo, en el trabajo y la vida ordinaria donde nos toca vivir, todos somos llamados a ser santos.

En la tertulia del sábado 13 de julio de 1974, que convocó a centenares de personas de todas las razas, edades, profesiones, oficios y condición sociales, que se llevó acabo en el auditorio del Instituto Valle Grande, San Josemaría nos habló de temas tan vigentes que nos afectan actualmente, la crisis de valores, de frecuentar los sacramentos que fortalecen nuestra fe, tener una vida cristiana, de santificar nuestra vida, trabajar que es una oración que agrada a Dios, que no somos malos, seguir las enseñanzas de Jesús, pidió especialmente rezar para que los sacerdotes sean buenos, amar a Dios y al prójimo, buscar la santidad en medio del mundo, en el trabajo y la vida ordinaria donde nos toca vivir, todos somos llamados a ser santos.

Publicado en la página 24 de la edición impresa del diario Expreso el viernes 12 de julio de 2024

Para leer la versión impresa del artículo en PDF haga click aquí

Isabel Verástegui Pelaez