Opus Dei

Blanca relata un favor de Isidoro Zorzano, a quien encomendó que una voluntaria de una asociación en la que trabaja obtuviera los permisos necesarios.

Llevaba varias semanas que no cuadraban las cuentas y el trabajo se acumulaba. Recé la estampa a Isidoro y volví a hacer los cálculos, que salieron correctamente.

Con 45 años y seis hijos era prácticamente imposible sacar adelante una oposición en la que debía estudiar 120 temas y superar 4 exámenes de 4 partes en dos idiomas distintos, así que decidí no presentarme. Pero Isidoro estaba empeñado en ayudarme, así que me presenté y saqué la oposición.

Parecía prácticamente imposible que mi marido de 55 años y yo de 52 encontráramos trabajo hoy en día. Gracias a Isidoro, lo conseguimos.

En 1961 el sacerdote don José Escribano acudió al médico con molestias en los pulmones. Las radiografías que se le hicieron mostraron signos de cáncer. En seguida la gente a su alrededor comenzó a rezar pidiendo su curación por intercesión de Isidoro Zorzano. Cuando los médicos le operaron para confirmar el diagnóstico, descubrieron que todo estaba perfecto.

Le agradezco mucho a Isidoro su ayuda con el cáncer

Finalmente la llamaron para dar clases en un instituto.

Cada vez que se me estropeaba un aparato acudía a Isidoro y él me lo solucionaba

La verdad es que no sé por dónde empezar a escribir la inmensidad de favores que me han sido concedidos por medio de la intercesión de Isidoro Zorzano.

Desde que empecé a trabajar en mi nuevo puesto he sabido que esto es un favor especial que me ha conseguido Isidoro. Sabía que era de justicia escribir esta carta, pero como ahora tengo tan poco tiempo, lo he ido demorando.