
Vida de María (XIV): Magisterio, Padres, santos y poetas
La escena de las bodas de Caná, reflejada en los textos del Magisterio, los Padres de la Iglesia, los santos o los poetas.
"La santidad está compuesta de heroísmos. Por tanto, en el trabajo se nos pide el heroísmo de ‘acabar’ bien las tareas que nos corresponden, día tras día".(San Josemaría.)
La escena de las bodas de Caná, reflejada en los textos del Magisterio, los Padres de la Iglesia, los santos o los poetas.
En Caná encontramos juntos a Jesús y a su Madre. Allí, por mediación de la Virgen, Cristo realizó un milagro que dio felicidad a unos recién casados. Nueva entrega de la vida de la Virgen.
El arte de convivir está estrechamente relacionado con la capacidad de pedir perdón y de perdonar. Todos somos débiles y caemos con frecuencia. Tenemos que ayudarnos mutuamente a levantarnos siempre de nuevo. Lo conseguimos, muchas veces, a través del perdón.
Oración: diálogo del hombre con Dios, de corazón a corazón. Una relación en la que el hombre puede poner cada vez más empeño, como se sugiere en este texto editorial.
En Nazaret transcurrió el Señor varios años de vida tranquila y ordinaria. Fueron años de trabajo, oración y vida en familia con María y José. Así lo relata la decimotercera entrega de esta Vida de María.
Narración en veinte escenas de la vida de la Virgen María, a partir de los Evangelios y de la tradición de la Iglesia.
Las vidas ocultas de Cristo, José y María -vidas de trabajo y normalidad en Nazaret- tal y como la han contemplado el magisterio, los padres de la Iglesia y otros autores espirituales.
¡Qué angustia la de la Virgen cuando se dio cuenta de que se le había perdido el Niño! Lo encontró en Jerusalén, como se contempla en esta nueva entrega de la vida de la Virgen.
Aunque pueden acudir a otros colaboradores, los padres son siempre los principales responsables de la educación de sus hijos, como se señala en este artículo.
"El ideal de los padres se concreta más bien en llegar a ser amigos de sus hijos", decía san Josemaría. Sólo así se crea la confianza que hace posible su educación.
La confianza que se nos muestra nos mueve a obrar; y nos paraliza, en cambio, sentir que desconfían de nosotros. Por eso, es muy ventajoso ayudar a los hijos a administrar su libertad.
En este texto se explica que, junto con la familia, también el Estado y la Iglesia poseen obligaciones ineludibles en el campo de la educación.