Dirigidos por el arquitecto Gerardo Barrabino, director del Club, trabajaron intensamente en la capilla dedicada a Nuestra Señora de la Medalla Milagrosa: pintura interior y exterior del templo, limpieza del altar, del retablo y del confesionario. Vecinos de la capilla, contagiados por el ambiente de trabajo, colaboraron plantando árboles en el jardín y ayudaron en diferentes tareas.
Los papás, como siempre, respaldaron la iniciativa y trabajaron como "chicos".
Las fotografías, antes y después del trabajo...
...son elocuentes.