«Los gatos son más listos que la gente»

Uno de los protagonistas de esta historia es un gato astuto y resentido que busca saciar su sed de venganza. Quien mejor conoce a este felino es Víctor, un Numerario del Opus Dei que cultiva el hobby de los comics.

«Miau, miau, miau», gritan con malicia un gato siniestro y sus dos secuaces, un gato gordo y otro rudo, mientras un burócrata trata de dormir después de su jornada de trabajo. Los mininos son peligrosos: están maquinando para perjudicar al sujeto que supuestamente les hizo daño.

Víctor Álvarez Pato, ingeniero y profesor en la Universidad Panamericana, campus Bonaterra, dibuja muñecos desde que estudiaba la primaria y recientemente ganó un concurso que le permitió publicar su historieta sobre el gato siniestro.

Los gatos, con artimañas inteligentes, logran entrar a la casa del abrumado trabajador y le revelan la razón de su enojo. Ahora el felino desea venganza…

Víctor decidió inscribirse en el concurso “Primer libro”, del Instituto Cultural de Aguascalientes, con la esperanza de ver publicado su cómic. La historia está basada en la situación que Víctor y sus vecinos vivían –o más bien sufrían– constantemente.

«A mi casa se metían unos gatos y despertaban a la gente; en las mañanas salíamos a perseguirlos con escobas, con tubos, con recogedores y todo lo que hubiera a la mano. Nunca agarramos ninguno, pero yo me divertí muchísimo».

A la par de su trabajo como profesor en la carrera de ingeniería, y de sus actividades como Numerario del Opus Dei, Víctor trata de organizarse para dedicarle el tiempo necesario al arte del cómic. Lo importante, afirma, es ponerse metas y tener fuerza de voluntad para sacar adelante cada proyecto.

«Tuve un fin de semana libre y fue el que aproveché para escribir la historia, y luego ya me puse a dibujar, con base en la premisa de que los gatos son más listos que la gente», señala con una sonrisa.

Víctor ha encontrado apoyo y aliento en Bef, también conocido como Bernardo Fernández, reconocido caricaturista, escritor y diseñador gráfico, quien le ha planteado retos muy útiles para progresar en el arte de hacer comics.

Sobre las historietas, Víctor opina que hay excelentes dibujantes en México y en el extranjero, pero destaca que, al menos a él, le gustaría ver con más frecuencia historias en las que se brindaran soluciones trascendentes a los problemas típicos de hoy.

El historietista reconoce que sus alumnos de ingeniería saben a qué dedica sus ratos libres, y que más de alguno conoce la existencia de este gato infame.