Antonio González-Adalid, ex presidente de Enagás, subrayó que “la responsabilidad social corporativa debe ser una actitud y práctica aglutinadora de decisiones empresariales fundamentadas en criterios éticos.”

Lucía Iborra, presidenta de la Asociación de Empresarios Solidarios Valencianos, señaló que las empresas no son las “únicas” entidades a las cuales cabría exigirles ser sensibles a las exigencias de la responsabilidad social, sino, en última instancia, “a todos los miembros de nuestra sociedad”. Por su parte, Pablo Sebastiá, Director de Marketing y Comunicación de Lubasa, consideró que con el transcurso de los años la ciudadanía se ha mostrado “recelosa” de las empresas cuyas prácticas suelen caracterizarse “por su dudosa legalidad”. 

Manuel Pizarro afirmó que la responsabilidad social corporativa se puede identificar con el objeto social de la propia empresa, que se podría definir como ser fiel a sí misma. Añadió que los accionistas deben involucrarse de forma más activa en sus corporaciones, siendo más proactivos y planteando iniciativas y objeciones sobre su desarrollo.

Como cada año desde 1994, el Colegio Mayor Alameda reúne a empresarios de la Comunidad Valenciana para debatir sobre el futuro de las empresas así como los factores humanos que confluyen en ellas.

Como en ediciones anteriores, los ingresos de la actividad se destinan al Fondo de Solidaridad del Colegio Mayor, concretamente para colaborar en la financiación de actividades de ayuda social en Nicaragua.