JMJ 2011: una segunda conversión

Rina siempre se había movido entre programas informáticos, internet, la web 2.0… campos de trabajo muy atractivos para los ingenieros, pero no los únicos en los que desarrollar la ingeniería. Ella encontró otro para servir mejor a la sociedad: hace la tesis en ingeniería biomédica y con sus compañeros de departamento del Centro de Investigación Médica Aplicada (CIMA) busca la manera de hacer frente a una enfermedad tan extendida hoy como es el cáncer: “Hay muchas maneras de tratarlo y la primera es detec...

Rina fue voluntaria de la JMJ y cursa un master en la Universidad de Navarra

...tarlo cuanto antes y de la manera menos invasiva”.

Indonesia es un país rico donde hay cinco religiones oficiales. Rina, que pertenece a una familia no católica, fue con sus hermanas a un colegio localizado en un convento. Allí descubrió la fe católica y se despertaron sus inquietudes. "Entonces les dije a mis padres que quería bautizarme, pero en ese momento no me dejaron, decían que era pequeña y que esa era una fe extranjera".

"A los 12 años me trasladé a Singapur. Iba a misa todos los domingos con una compañera que tampoco era católica. Siempre nos salíamos antes de la comunión. Cuando volví a casa en vacaciones, mis padres me contaron que habían decidido que nos bautizaríamos todos. ¿Por qué? Nunca se lo pregunté. Teníamos unos vecinos católicos que nos pusieron en contacto con el sacerdote y a los pocos días nos bautizamos. Ellos fueron nuestros padrinos".

En 2006 comenzó a asistir a un seminario de Bioética. Entre los participantes estaba también un chico al que conocía de su niñez y al saber que era del Opus Dei le pidió que le explicara pero "no entendí nada". Más adelante, comenzó a acudir a formarse a un centro de la Obra en Singapur, donde buscaba dos cosas: formación y tener cerca un sagrario.

A Rina el mensaje del Opus Dei no le parecía extraño: "siempre había identificado el trabajo como algo para ofrecer a Dios. De hecho, me parece un tema universal que hablo con mis amigos, incluso los no cristianos". A través de vídeos sobre San Josemaría fue descubriendo que su mensaje "habla de cosas corrientes con las que cualquiera podemos identificarnos".

Poco a poco fue conociendo la Obra y descubrió su vocación de numeraria . Hace dos años que se trasladó a Pamplona para realizar un máster en Investigación Biomédica y hacer su tesis en la Universidad de Navarra . De España le gusta la cultura cristiana "¡aquí hay iglesias del siglo X! En Indonesia, la diócesis más antigua cuenta con solo doscientos años. Realmente, España es un país de tradición católica".

Rina acaba de participar en su segunda JMJ . Tuvo su primera experiencia como voluntaria en 2005 en Colonia y este verano ha repetido en Madrid. Pensando en esos días, tan llenos de trabajo y de gran intensidad comenta que ante acontecimientos de tal magnitud "siempre habrá fallos de organización. En esta y en otras JMJ es lo previsible, pero lo que yo buscaba y me llevo esta vez es la convicción de que soy yo la que tiene que cambiar. A pesar de los muchos o pocos años que llevemos siendo cristianos, siempre es posible convertirse de nuevo, escuchar de nuevo a Dios y dar un paso adelante para mejorar en la vida cristiana".