“En la Universidad de Navarra siempre ha habido gente con corazón grande que soñaba cosas imposibles”

La Universidad de Navarra cumple 60 años y estrena rector. Alfonso Sánchez-Tabernero es salmantino. Por sus venas charras corre sangre ganadera y universitaria, dos tradiciones que marcan. Es catedrático, doctor en Ciencias de la Información y ha sido profesor de Empresa Informativa en la Universidad de Navarra, donde ha dirigido el Máster en Gestión de Empresas de Comunicación, además de profesor de Estructura de la Información Periodística y vicedecano de la Facultad de Ciencias Sociales de la Informac...

'Según estudios de marca, en España es percibida como una universidad de calidad, prestigiosa, exigente y con un proyecto educativo basado en propuestas del pensamiento cristiano'.

...ión de la UPV.

Sesenta años es una edad respetable para una persona, pero para una universidad revela una juventud insultante. ¿Qué grado de madurez ha alcanzado en este tiempo?

Las universidades son tarea de siglos y por eso quienes están al frente de ellas no se pueden plantear un sprint que tenga efecto sorprendente. Tenemos que pensar cómo queremos que se encuentren la universidad dentro de 150 años. La Universidad de Navarra camina con paso sólido, ya no es un bebé. Ha crecido, ha hecho cosas importantes, pero es todavía joven.

¿Qué hitos destacaría en esta corta historia?

En el ADN de la Universidad de Navarra está llegar a ser una gran universidad. Su  fundador, San Josemaría , decía: “no me hagáis un pajarito”. Que nazca pequeño, pero con el tiempo tiene que volar. Por eso, quien buscó los terrenos, no escogió un sitio reducido sino un campus grande que pudiera albergar muchos edificios. Desde el principio, la Universidad se esforzó por tener alumnos extranjeros y por investigar, cuando no había medios; por abrir sus puertas a alumnos de todas las condiciones... Lo interesante es que todo lo que hemos ido acometiendo tiene que ver con el cumplimiento de los sueños de San Josemaría. Siempre ha habido en la Universidad gente de corazón grande que soñaba con un futuro que parecía imposible en la España de los años 50 y 60, un país pobre y cerrado al mundo. Es un legado valiosísimo que procuramos recordar y contar.

¿Cómo es percibida la Universidad en España y en otros países?

Según estudios de marca, en España es percibida como una universidad de calidad, prestigiosa, exigente y con un proyecto educativo basado en propuestas del pensamiento cristiano. En el mundo, depende. Somos conocidos en el ámbito médico, en el de la comunicación, en el de la ingeniería, o la empresa. Nuestra idea es desarrollar ámbitos de excelencia que nos hagan ser conocidos en distintos sectores. El Museo de Arte , por ejemplo, nos ofrece una buena oportunidad.

'La universidad tiene que dejar de ser un lugar donde un profesor cuenta cosas a unos alumnos para convertirse en un lugar donde profesores y alumnos trabajan juntos'.

¿Quién elige al rector de la Universidad?, ¿qué cualidades debe tener?

Lo elige el Gran Canciller de la Universidad , que actualmente es Monseñor Javier Echevarría. Solemos decir que la Universidad de Navarra ha tenido en cada momento el rector que necesitaba. No siempre con las mismas características, aunque hay algunas que se piden a todos: ser profesor universitario, persona prudente, con capacidad de entenderse con los demás, de ilusionar a otros en un proyecto magnánimo. En mi caso, me gusta el mundo internacional y creo que es el momento de dar el salto. Toca incrementar la autonomía de los centros, y pienso que tiene un  gran interés por delegar en esta organización tan compleja que requiere la movilización de cinco mil empleados y contar hacia fuera que tenemos un proyecto estupendo que merece la pena apoyar.

¿Qué se espera de una universidad del siglo XXI? ¿Hay vida universitaria después de Bolonia?

En la Universidad de Navarra, como en todas, hay gente a favor de Bolonia, en contra y  neutral. Me parece que un cambio legal no condiciona mucho. Una universidad es lo que quiere que sea la gente que trabaja en ella. Por mi parte, creo que los alumnos tienen que ser más protagonistas de su formación.

La universidad tiene que dejar de ser un lugar donde un profesor cuenta cosas a unos alumnos para convertirse en un lugar donde profesores y alumnos trabajan juntos. Tenemos que hacer un esfuerzo para que los alumnos tengan más capacidad de emprender. Otra cuestión importante es la internacionalidad: tienen que ser gente que conozca idiomas. Y la cultura. Una persona que entiende el mundo en que vive y ha leído buena literatura está en condiciones de aprender, de adaptarse, de situar las cosas que suceden en un contexto antropológico, sociológico, de avanzar.

'Muchos empleadores nos dicen que los alumnos de la Universidad de Navarra destacan por sus ganas de trabajar, su buena educación, por su alegría, por su honradez y su criterio moral a la hora de afrontar los problemas'.

¿Cómo sobrevive una universidad privada en tiempos de crisis?, ¿de dónde saca el dinero la Universidad de Navarra?

A todo el mundo le afecta la crisis y también a nosotros. La afrontamos con imaginación, con creatividad, evitando la cultura de la queja, trabajando más. Buscamos personas que apoyen nuestros programas de becas , hemos puesto ofertas de grado, nuevos postgrados, etc.

¿En qué se parecen y en qué se distinguen un alumno formado en la Universidad de Navarra de otro formado en cualquier otra universidad?

De todas las universidades salen todo tipo de alumnos, lo interesante es conocer los  porcentajes. Muchos empleadores nos dicen que los alumnos de la Universidad de Navarra destacan por sus ganas de trabajar, su buena educación, por su alegría, por su honradez y su criterio moral a la hora de afrontar los problemas.

'Hace unos cinco años iniciamos un programa que supone el cumplimiento de un sueño del Fundador: que nadie que tenga ganas de estudiar deje de hacerlo por falta de recursos'.

¿Cuál es el perfil social de los alumnos que vienen a una universidad privada como es la de Navarra?, ¿caben los alumnos brillantes de escasos recursos económicos o sólo estudiantes de elite?

Dos tercios de nuestros alumnos no son navarros y tienen que hacer un esfuerzo económico grande para venir. No observamos una diferencia relevante con el universitario español medio. Un tercio de nuestros alumnos tienen becas, ayudas o descuentos. Hace unos cinco años iniciamos un programa que supone el cumplimiento de un sueño del Fundador: que nadie que tenga ganas de estudiar deje de hacerlo por falta de recursos. Lo que distingue a nuestros alumnos es su afán por trabajar. Tienen un compromiso con su educación y buscan un lugar exigente donde les ayuden a formarse con un criterio de honradez.

La universidad forma la inteligencia pero también prepara para la vida laboral. Con la crisis, ¿ha disminuido el porcentaje de inserción laboral de los graduados en la Universidad? ¿qué aconsejan a los estudiantes ante un panorama tan poco alentador ?

En nuestro caso el porcentaje ha descendido poco. Tenemos cifras de inserción laboral en los primeros meses superiores al 86%. En la Universidad de Navarra insistimos en que una persona incrementa su empleabilidad extraordinariamente si trabaja mucho, si tiene empatía con el empleador potencial, si conoce idiomas, si tiene una buena formación intelectual, si tiene criterio. Nuestro proyecto es: queremos formar alumnos que cuando acaben tengan una experiencia laboral muy plena y satisfactoria y que sean palanca del cambio de la sociedad.