Milán dedica una plaza a san Josemaría

En Milán, a pocos metros de la Basílica de S. Ambrosio, se ha dedicado una plazoleta a san Josemaría. El acto, que tuvo lugar el pasado 18 de enero, fue presidido por el alcalde de la ciudad, Gabriele Albertini.

Palermo, Terrasini, Bari, Roma, Soveria Mannelli, Jonadi, Catania, Bologna. Eran ocho las poblaciones de Italia que hasta el momento habían dedicado calles o plazas al fundador del Opus Dei. A esta lista se ha unido Milán, que el pasado 18 de enero dedicó a san Josemaría una pequeña plaza que se encuentra en el casco antiguo de la ciudad, a poca distancia de la Basílica de San Ambrosio.

El acto estuvieron presentes el alcalde de Milán, Gabriele Albertini, mons. Erminio De Scalzi, obispo abad de la basílica, y el vicario del Opus Dei en Italia, mons. Lucio Norbedo. En su discurso, al alcalde recordó la canonización de san Josemaría, que describió como “un acontecimiento que ha hecho reflexionar y que ha suscitado el interés de muchas conciencias”. Albertini añadió que la dedicación de esta pequeña plaza quiere significar que “nuestra ciudad, que debe gran parte de su fama al trabajo de sus ciudadanos y a su mirada optimista hacia el mundo, quiere rendir homenaje a la figura carismática del santo fundador del Opus Dei”.

El obispo De Scalzi bendijo después la placa con el nombre del santo. En el breve discurso que pronunció, manisfestó estar particularmente orgulloso de que la plaza san Josemaría se encuentre en el territorio de su parroquia, la magnífica Basílica de S. Ambrosio, noble construcción de estilo románico.

Misa de acción de gracias

El día anterior había tenido lugar, en la misma Basílica, una Misa de acción de gracias por la canonización de Josemaría Escrivá. Alrededor del altar, una joya del arte medieval, se situaron 9 sacerdotes que concelebraron junto a mons. Erminio De Scalzi, abad de la Basílica.

Basílica de S. Ambrosio.

En su homilía, el obispo De Scalzi, además de glosar los aspectos más significativos del mensaje del nuevo santo, recordó el primer viaje de san Josemaría a Milán en 1949. Entonces el fundador del Opus Dei fue a visitar al cardenal Schuster, que le animó a empezar cuanto antes el trabajo del Opus Dei en Milán.

San Josemaría no dudó en aceptar la invitación, y los primeros fieles del Opus Dei, jóvenes estudiantes y profesionales provenientes de Roma, se trasladaron a Milán en diciembre de 1949. Llevaron consigo una copia de “Camino”, el libro más conocido y difundido de san Josemaría, con una dedicatoria de su puño y letra: «A esos hijos míos, que empiezan a trabajar junto a la “Madonnina”, con mi bendición y un abrazo. -Roma, Inmaculada Concepción, 1949». La “Madonnina” es la imagen de Nuestra Señora que corona la aguja más alta del Duomo de Milán.