La compasión de Jesús
Si queremos ayudar a los demás, hemos de amarles con un amor que sea comprensión y entrega, afecto y voluntaria humildad. Así entenderemos por qué el Señor decidió resumir toda la Ley en ese doble mandamiento: el amor a Dios y el amor al prójimo, con todo nuestro corazón.
Hacerse como niños
Si alguno quiere ser el primero, hágase el último de todos y servidor de todos. Y tomando a un niño, lo puso en medio de ellos, lo abrazó y les dijo: El que reciba en mi nombre a uno de estos niños, a mí me recibe; y quien me recibe, no me recibe a mí, sino al que me envió.
La oración de Jesús
Descubriremos, con El, cómo se puede dar relieve sobrenatural a las actividades aparentemente más pequeñas; aprenderemos a vivir cada instante con vibración de eternidad, y comprenderemos con mayor hondura que la criatura necesita esos tiempos de conversación íntima con Dios.
La mirada de Cristo
A los cristianos no nos importa el qué dirán. Nos importa la mirada de Cristo. Vídeo grabado en Londres, en 1985, durante un viaje pastoral de Mons. Álvaro del Portillo.
Corpus Christi
Es la profundidad del amor del Señor, lo que le ha llevado a quedarse oculto bajo las especies sacramentales.
La Ascensión del Señor
La fiesta de la Ascensión del Señor nos sugiere también otra realidad; el Cristo que nos anima a esta tarea en el mundo, nos espera en el Cielo. En otras palabras: la vida en la tierra, que amamos, no es lo definitivo.
"Y yo te pregunto a vos: ¿Vos, cuándo te encontraste con Jesús?, ¿Tuviste un encuentro con Jesús o lo estás teniendo ahora?"
En vísperas de la canonización de Juan Pablo II y Juan XXIII, el papa Francisco volvió a hablarles a los jóvenes argentinos. Los invitó a reflexionar sobre su encuentro con Jesús. El mensaje fue transmitido por pantallas gigantes ubicadas en el Planetario de la Ciudad de Buenos Aires.
La alegría de la Pascua
Se apareció a su Madre Santísima. —Se apareció a María de Magdala, que está loca de amor. —Y a Pedro y a los demás Apóstoles. —Y a ti y a mí, que somos sus discípulos y más locos que la Magdalena: ¡qué cosas le hemos dicho!
Viernes Santo
El alma que sabe amar y entregarse así, se colma de alegría y de paz. Entonces, ¿por qué insistir en "sacrificio", como buscando consuelo, si la Cruz de Cristo —que es tu vida— te hace feliz?
Semana Santa
La Semana Santa no puede reducirse a un mero recuerdo, ya que es la consideración del misterio de Jesucristo, que se prolonga en nuestras almas; el cristiano está obligado a ser otro Cristo, el mismo Cristo.